Puede parecer un cuento infantil, o una peli de buenos y malos, pero la realidad ha sido tristemente así. La historia es larga y apasionante, pues pone de relieve toda la vileza que puede llegar a manifestarse en política. Quien no la haya seguido directamente puede encontrar un pormenorizado seguimiento aquí (para usuarios registrados en el ForoIU).
Esta tarde los dos diputados del Bloc y las dos diputadas tránsfugas de Iniciativa del Poble Valencià (que consiguieron su escaño como candidatas de EUPV) expulsarán a Glòria Marcos, coordinadora de EUPV y candidata a la Presidencia de la Generalitat Valenciana por la coalición Compromís. Así culminará un proceso inquisitorial y chapucero que pusieron en marcha el pasado martes, aprobando la apertura de un expediente sin hacer mención a los hechos que lo motivaban y presentando después un pliego de cargos absolutamente falsos y sin prueba alguna.
Esto es sólo el final de una historia de persecución personal a Glòria, que primero fue destituida del cargo de portavoz parlamentaria -que le correspondía por el acuerdo de coalición, por la decisión de la Comisión Política y por la votación de los electores-, después fue acosada durante meses de todas las maneras posibles a través de insultos públicos y del boicot a su trabajo parlamentario, y finalmente va a ser expulsada para quedar como "no adscrita", acompañada de los otros dos diputados de EUPV, LLuís Torró y Marina Albiol.
Pero, como han dejado claro Lluís y Marina, esto no es una cuestión personal, sino política. La dirección del Bloc, con la inestimable y necesaria colaboración de las tránsfugas de Iniciativa (y la complicidad de Gaspar Llamazares y el núcleo dirigente de IU hasta el 20 de enero pasado), pretende usurpar el espacio electoral, la representación institucional y los recursos económicos que legítimamente corresponden a Esquerra Unida para la defensa del programa de izquierdas que votaron casi doscientos mil valencianos y valencianas.
El Bloc, que en solitario jamás ha conseguido representación parlamentaria, e Iniciativa, que ni siquiera se ha presentado a las elecciones, se van a quedar con el grupo parlamentario y todo el dinero correspondiente a la subvención institucional. ¿Para qué? Para intentar convertirse en fuerza bisagra entre PP y PSOE, vulnerando el programa electoral que firmaron ante notario, como ya han hecho en votaciones sobre el AVE, los trasvases o la financiación autonómica.
Tengo claro que no lo conseguirán. Nos habrán arruinado económicamente y expoliado políticamente, pero no sacarán ningún beneficio de ello -más allá de chupar del bote los tres años que quedan de legislatura. Han quedado como lo que son: unos piratas, unos sinvergüenzas, unos corruptos (Rafa Pla, hoy en Levante, les llama directamente "botiflers").
Mientras se suceden las muestras de apoyo de militantes de EUPV a Glòria Marcos, LLuís Torró y Marina Albiol -los tres cabezas de lista de la coalición Compromís en las elecciones autonómicas, que ahora quedan expulsados por una mayoría numérica, que no política-, seguimos sin escuchar una sola palabra todos aquellos que tanto presionaron para que hiciéramos el pacto con el Bloc, incluido nuestro coordinador general.
Esta tarde los dos diputados del Bloc y las dos diputadas tránsfugas de Iniciativa del Poble Valencià (que consiguieron su escaño como candidatas de EUPV) expulsarán a Glòria Marcos, coordinadora de EUPV y candidata a la Presidencia de la Generalitat Valenciana por la coalición Compromís. Así culminará un proceso inquisitorial y chapucero que pusieron en marcha el pasado martes, aprobando la apertura de un expediente sin hacer mención a los hechos que lo motivaban y presentando después un pliego de cargos absolutamente falsos y sin prueba alguna.
Esto es sólo el final de una historia de persecución personal a Glòria, que primero fue destituida del cargo de portavoz parlamentaria -que le correspondía por el acuerdo de coalición, por la decisión de la Comisión Política y por la votación de los electores-, después fue acosada durante meses de todas las maneras posibles a través de insultos públicos y del boicot a su trabajo parlamentario, y finalmente va a ser expulsada para quedar como "no adscrita", acompañada de los otros dos diputados de EUPV, LLuís Torró y Marina Albiol.
Pero, como han dejado claro Lluís y Marina, esto no es una cuestión personal, sino política. La dirección del Bloc, con la inestimable y necesaria colaboración de las tránsfugas de Iniciativa (y la complicidad de Gaspar Llamazares y el núcleo dirigente de IU hasta el 20 de enero pasado), pretende usurpar el espacio electoral, la representación institucional y los recursos económicos que legítimamente corresponden a Esquerra Unida para la defensa del programa de izquierdas que votaron casi doscientos mil valencianos y valencianas.
El Bloc, que en solitario jamás ha conseguido representación parlamentaria, e Iniciativa, que ni siquiera se ha presentado a las elecciones, se van a quedar con el grupo parlamentario y todo el dinero correspondiente a la subvención institucional. ¿Para qué? Para intentar convertirse en fuerza bisagra entre PP y PSOE, vulnerando el programa electoral que firmaron ante notario, como ya han hecho en votaciones sobre el AVE, los trasvases o la financiación autonómica.
Tengo claro que no lo conseguirán. Nos habrán arruinado económicamente y expoliado políticamente, pero no sacarán ningún beneficio de ello -más allá de chupar del bote los tres años que quedan de legislatura. Han quedado como lo que son: unos piratas, unos sinvergüenzas, unos corruptos (Rafa Pla, hoy en Levante, les llama directamente "botiflers").
Mientras se suceden las muestras de apoyo de militantes de EUPV a Glòria Marcos, LLuís Torró y Marina Albiol -los tres cabezas de lista de la coalición Compromís en las elecciones autonómicas, que ahora quedan expulsados por una mayoría numérica, que no política-, seguimos sin escuchar una sola palabra todos aquellos que tanto presionaron para que hiciéramos el pacto con el Bloc, incluido nuestro coordinador general.
Sobreviviremos.
1 comentario:
siento contigo y seguro que con miles de compañeros tu gran indignacion. Y la sufrimos por esto y por mil cosas mas.
Por todos esos que han traicionado a la izquierda, usandonos de trampolin a su carrera politica algunos hasta llegaron a ministros socialistas, y otros malvendiendonos por prebendas indignas.
una gota mas, que no se porque se calla.
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